Pastel de queso y fresa

Es un placer estar de vacaciones y disfrutar de la familia y del tiempo libre que me queda, que os aseguro que no es poco; con tres hijos: dos en plena adolescencia y un bebé de 23 meses, es una locura; pero me hacen muy feliz!!!

Ahora mismo estoy aprovechando que están todos durmiendo tranquilamente y puedo dedicarme a escribiros este post; cuando se despierten empieza la marcha y ya es impossible hasta la noche poder acabar para que podáis hacer esta receta que os voy a dar tan fantástica y sencilla, ya que tenéis que hacerla con tiempo.

Como las temperaturas han vuelto a subir y encender el horno es morirse a no ser que sea super mega imprescindible, he optado por hacer una receta fresquita, sin horno y estupendísima de buena; y a los niños les encanta... Tranquilos no os voy  meter otro rollo jejeje

Pues ahí van los ingredientes que necesitáis, son muy pocos y seguro que muchos de vosotros los tenéis casi todos en la nevera y se pueden encontrar fácilmente.

Ingredientes

• 250 gr de queso philadelphia
• 3 vasos de leche semi desnatada
• 1 vaso de azúcar
• 3 cucharadas de fresa en pasta
• 7 hojas de gelatina

Elaboración

En primer lugar, ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría.

En segundo lugar, cogemos el queso crema y lo mezclamos bien con dos tazas de leche fría; podéis utilizar queso light, bajo en calorias, a mí personalmente me gusta el queso philadelphia pero vosotros podéis utilizar el que más os guste. Tenéis que mezclarlo bien hasta que no quede ningún grumito de queso.

A continuación agregáis el azúcar y las cucharadas de pasta de fresa; yo como no tenia, ni he encontrado fresas naturales puse este pero si tenéis fresas naturales podéis echarle naturales o comprar una lata confitadas, triturar con el minipimer, así nos aseguramos que no quede ningún grumo.

Por último, calentamos el último vaso de leche e introducimos la gelatina y removemos bien hasta que se haya desecho totalmente. Es muy importante que se deshaga totalmente y no quede ningún grumo porque después os lo encontrareis en el pastel y no es muy agradable.

Mezclamos con la mezcla anterior y vertemos en un molde, el que más os guste. Recordar que si el molde no es de silicona tenéis que rociarlo con spray desmoldante.

Dejamos enfriar en la nevera un par de horas y listo para comer.

Como podéis ver yo he puesto frambuesas de decoración porque no hubo manera de encontrar fresas en el super.